La Feria de las Flores

Antioquia es uno de los departamentos más montañosos de Colombia, de hecho su capital, Medellín, se conoce como la capital de la montaña.
La difícil geografía y la falta de vías hacia que en las épocas de la Colonia, se emplearan cargadores para movilizar a la gente de una región a otra. A estas personas se les conocía como silleteros.

Con el paso de los años y la construcción de carreteras, las silletas comenzaron a tener otros usos.
Por ejemplo, en ellas se traían a Medellín las flores y el mercado del corregimiento de Santa Elena para ser vendidos en la Placita de Flores, ubicada en el barrio Buenos Aires o en las calles de Prado, Boston y el centro de la ciudad.

Precisamente, ver los campesinos con las flores en sus silletas y el espectáculo natural y colorido que ello representaba, motivó en 1957 a don Arturo Uribe, quien era miembro de la Junta de la Oficina de Fomento y Turismo, proponerle a estos hombres y mujeres que marcharan en un desfile para celebrar la semana de las flores.

Esta fue la semilla del actual Desfile de Silleteros y una manera de conservar la tradición silletera en Antioquia.

es una fiesta anual comunitaria y masiva que se celebra en Medellin. Esta feria es la celebración citadina emblemática e icono de la ciudad, 

Cada año, miles de personas se reúnen en Medellín en torno a esta gran fiesta, al recuerdo y los valores de toda la región antioqueña que celebra el florecimiento de la raza y sus costumbres;

Las actividades que dan vida a la Feria de las Flores son múltiples. Son más de 130 eventos de fiesta, incluidos los tablados musicales por todos los barrios de la ciudad, especialmente los más populares.

Tal es el caso de la celebración de los eventos llamados Arrieros, mulas  y fondas cabalgata Record Guiness y Desfile de silleteros.

La Feria de las Flores, cuyas actividades centrales se realizan entre los meses de julio y agosto es, sin duda, un evento que reúne a todos los antioqueños y a miles de turistas que visitan la ciudad de Medellín en esos días del año, convirtiéndola en un espacio que vibra con las flores, la alegría, la paz y la diversión.

Por eso, Medellín, conocida entre otros apelativos como "Ciudad de la eterna primavera", se engalana desde hace 52 años con naturaleza, para que sus habitantes puedan disfrutar de todos sus elementos culturales tradicionales.